viernes, 19 de junio de 2009
Cormorán moñudo: el fin de la temporada
Ya queda lejos el mes de diciembre, cuando los cormoranes moñudos comenzaron las paradas nupciales. Desde entonces han pasado muchas cosas, muchos nidos fracasaron durante la incubación o la crianza temprana, algunos adultos murieron ahogados en los trasmallos, los visones americanos entraron por primera vez en las colonias asturianas matando a los pollos y arruinando todo su esfuerzo.
Afortunadamente algunas parejas han tenido éxito y han logrado sacar adelante a sus crías que ya están totalmente emplumadas y listas para hacer su primer vuelo. Los adultos visitan el nido con menos frecuencia y animan a los jóvenes desde el posadero para que lo abandonen definitivamente.
Una vez fuera del nido, los jóvenes de varias familias se agrupan en las rocas que rodean la colonia formando guarderías y allí esperan a que sus padres vayan a cebarlos. Durante al menos un mes los seguirán alimentando y los enseñarán a pescar. Al principio sus inmersiones son muy breves pero poco a poco se irán haciendo más largas hasta que ya serán capaces de pescar por si sólos y se independizarán completamente.
La mortalidad durante el primer año será muy elevada y muchos de los jóvenes no superarán el primer mes de independencia. Si todo va bien dentro de dos años o tres años regresarán a la colonia para comenzar de nuevo el ciclo.
NOTA FINAL: Acabo de llegar de Vegadeo de recoger dos cadaveres de cormorán. Ayer me avisó Pablo Fernández, guarda de la zona de Tapia, que los había encontrado en la Playa de Santa Gadea, a menos de 100 metros de la colonia de Pantorgas. Los dos erán jóvenes de este año, uno de ellos lo habíamos anillado el 7 de mayo en esa colonia y probablemente hacía menos de dos semanas que había abandonado el nido. Los dos tenían buen aspecto y su peso era normal. Probablemente habrán muerto en un aparejo como tantos otros antes y desgraciadamente como muchos seguirán muriendo después.
3 comentarios:
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Gracias
Pues a ver si salen adelante los que lo han conseguido. Y a ver si de una vez por todas alguien de arriba se pone a pensar en los problemas que tienen para hacerlo.
ResponderEliminarAquí en Madrid llevamos años viendo cormoranes también (los grandes supongo), a mí al principio me extrañaba porque no sé si es que nunca me había fijado y siempre habían estado ahi o era nuevo. Creo que más bien lo segundo, los ves en plena capital rodeados de carreteras por todas partes posados en cualquier parte del rio Manzanares. Y también junto con gaviotas frecuentan una laguna que tengo cerca de casa, un día estuve observando cómo pescaban. Qué capacidad. Me parecen una maravilla.
Hola Mamen, los que ves en Madrid son cormoranes grandes, los moñudos son estrictamente marinos y es muy muy raro que aparezca alguno en el interior. Los grandes ya estan criando en algunos embalses interiores de la provincia de Toledo,así que probablemente si los ves en vernano alguno será de esas colonias.
ResponderEliminarun saludo
La imágen de la Playa de Santa Gadea es preciosa, tan buena como tu artículo, aunque eso no es nuevo; y contrasta con la triste nota final de la muerte de los dos cormoranes, al menos uno de ellos anillados por vosotros.
ResponderEliminarSigo pensando que es urgente que las empresas y los gobiernos debieran poner cuanto antes los medios necesarios para fomentar investigaciones en en pesca sostenible, o en pos de nuevas técnicas de pesca igual de efectivas pero menos invasivas.
Salu2,
-- Matchet