Los cormoranes, al contrario que otras aves marinas, dan un pequeño salto en el agua antes de sumergirse en busca de sus presas. En el salto, estas aves salen completamente fuera del agua mientras mantienen las alas pegadas al cuerpo.
Cormorán moñudo joven
Una vez bajo el agua, sólo utilizarán sus patas palmeadas para bucear, mientras que las alas seguirán pegadas al cuerpo durante toda la inmersión, usando la cola como timón, como se puede ver en el siguiente vídeo. En los cormoranes, las alas se usan exclusivamente para el vuelo, por lo que un cormorán que no necesitara volar tampoco necesitaría las alas.
Así bucean los cormoranes (jebarra)
Esto es lo que ha ocurrido con una una especie de esta familia, el cormorán áptero de las Galápagos (Phalacrocorax harrisi, antes Nannopterum harrisi), en la que las alas se han atrofiado completamente, siendo actualmente tan sólo unos órganos vestigiales sin ninguna funcionalidad. Un ancestro de esta especie habría llegado hace miles de años a este remoto archipiélago y al encontrarse sin depredadores, las alas le resultaron inútiles, ya que podía conseguir alimento y pareja sin necesidad de usarlas. Debido a esto y tal como explica la teoría de la selección natural de Darwin, esta falta de uso las hacía inútiles por lo que eran un inconveniente mas que una ventaja. Los descendientes de esos primeros cormoranes que tuvieron las alas mas cortas resultaron más competitivos que los de alas largas y su éxito reproductor fue mayor que el de estos últimos, dejando por lo tanto mas descendientes que resultaban cada vez mas competitivos (y cada vez tenían las alas mas cortas al aparearse entre ellos). A lo largo de miles de generaciones se fueron seleccionando aquellos individuos que tenían cada vez las alas mas cortas, y actualmente esta especie ha perdido completamente la capacidad de volar. A pesar de esto, después de cada inmersión siguen secando esas alas vestigiales al sol, lo que es un recuerdo evolutivo de cuando necesitaban secar el plumaje para volar. Aquí os dejo un video de Richard Dawkins que lo explica mucho mejor que yo (si lo queréis ver con subtítulos pincháis la segunda tecla por la izquierda en la barra inferior, se abrirá un menu desplegable y pincháis la segunda tecla).
Como dice el propio Dawkins, la evolución por selección natural "es un hecho respaldado por pruebas irrefutables" y el cormorán es una de esas pruebas.