Las fluctuaciones en el clima tienen un efecto muy importante sobre la dinámica de las poblaciones naturales, como ha quedado demostrado en numerosos trabajos científicos. En muchas especies, el clima tiene un efecto directo sobre la disponibilidad de alimento y sobre el hábitat, lo que incide directamente en algunos parámetros demográficos como el éxito reproductor, la supervivencia o la dispersión post-generativa.
Área de estudio
Proporción de machos de cormorán moñudo que abandonan el nido en las islas Cíes durante el periodo de estudio (el número dentro de cada círculo indica el número de pollos que fueron sexados).
El análisis de los datos confirmó que en aquellos años en los que el índice NAO fue positivo (inviernos cálidos y fríos), el sex-ratio en el momento de la emancipación de los pollos estuvo sesgado hacia las hembras. No encontramos ninguna relación entre la temperatura superficial y el sex-ratio.
Distancia desde la colonia de nacimiento al lugar de primera reproducción en las dos áreas de estudio (Asturies: cuadrados; Galicia: triángulos). Los machos están representados por los símbolos negros y las hembras por los símbolos blancos.
La distancia media a la que se dispersaron los jóvenes de cormorán (de los que conocíamos su sexo) fue de 11,53 km (rango: 0,02 - 318 km). El 75% de ellos reclutaron (se reprodujeron por primera vez) a una distancia menor de 5 km del lugar en el que habían nacido, siendo las distancias medias de dispersión similares para machos y hembras. A pesar de esto, confirmamos que las variaciones climáticas durante las fases tempranas del desarrollo tuvieron un importante efecto sobre la distancia de dispersión, observándose que las hembras se dispersaron más lejos en aquellos años con valores positivos de NAO, mientras que en los machos ocurrió lo contrario.
Estos resultados sugieren la existencia de una relación entre las oscilaciones climáticas y la proporción de sexos en el momento del abandono del nido. El cormorán moñudo es una especie dimórfica en la que los machos son un 22% más pesados que las hembras en ese momento, por lo que durante el periodo de crianza necesitan más recursos que ellas. Se ha comprobado que la presencia de ciertos peces y crustáceos en el área de estudio disminuye en los años en los que el índice NAO es negativo, que son los años en los que el sex-ratio está sesgado hacia las hembras. Asimismo, en estudios previos hemos comprobado que aquellos años en los que el NAO es positivo, la mortalidad en el nido es mayor, por lo que todo parece indicar que los machos, al ser los que necesitan más recursos sea el sexo que experimente una mayor mortalidad durante el desarrollo.
Las condiciones iniciales de desarrollo pueden afectar a la distancia de dispersión a través de dos mecanismos diferentes: afectando a la capacidad física para dispersarse o afectando a la motivación para dispersarse debido al entorno social en el que se encuentran o a la calidad del hábitat. Nosotros hemos confirmado que el entorno social que encuentran los juveniles en el momento del abandono del nido está afectado por las condiciones climáticas por lo que los machos se dispersarán más lejos en aquellos años en los que vuelan más machos, mientras que las hembras harán lo mismo si el sex-ratio está desbalanceado hacia ellas.
Estos resultados sugieren que las condiciones climáticas afectan a la proporción de sexos en las colonias de cría, lo que tiene importes efectos en la edad adulta que pueden condicionar la dinámica de las poblaciones.
Referencias
Barros A, Álvarez D & Velando A (2013) Climate influences fledging sex-ratio and sex-specific dispersal in a seabird. PLos ONE 8(8): e71358. doi: 10.137/journal.pone.0071358.
Interesante entrada, es curioso como en la naturaleza todo está interrelacionado. Un saludo
ResponderEliminarThis is great!
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