viernes, 31 de enero de 2014

Premios 20 Blogs


Después de haber ganado el premio 20 Blogs en la VIII edición de estos preimios con el blog a "Naturaleza Cantábrica" en la categoría de Medio Ambiente, este año voy a probar suerte con la página hermana del blog en Facebook "NaturalezaCantábrica_Facebook" en la X Edición de los Premios 20 Blogs, en la categoría de "Redes sociales y videoblogs".

Para votar al blog tenéis que perder unos segundos. Lo primero es acceder a ESTE LINK (o pinchar en el dibujito de la barra de la derecha) y votar, pero antes tenéis que hacer es registraros, me imagino que para evitar que una misma persona pueda votar varias veces por el mismo blog.

Cuando pinchéis en el link os aparecerá esta ventanita. Lo podéis hacer por el facebook o hacer un registro normal, aunque me parece que para registrarse hay que hacer el protocolo normal y luego ya se pueden entrar por el enlace de Facebook.


Cuando pinchéis ahí se os abrirá la siguiente ventanita. Sólo es necesario que rellenéis los campos que he marcado con una X y activar las casillas del final.


Luego hacéis click en "Activar registro de usuario" y entonces os llegará un mensaje a vuestra bandeja de correo, si no llega a lo mejor es que vuestro servidor lo metió en la bandeja de spam, por si acaso mirad ahí.


En el mensaje que os llegará os dirán que pinchéis en un link que aparece para activar el registro. Pinchad en ese link y os aparecerá una pantalla como la primera pero con la casilla de voto en azul, que pondrá "Vota a este blog". Si no os aparece directamente, sin cerrar esa pestaña, id al primer enlace al que llegasteis al hacer click en ESTE LINK al principio y comprobaréis que ya estáis registrados, así que sólo tenéis que votar.


Debéis de fijaros en hacer click donde pone "Vota a este blog" para que el voto sea válido. No hagáis click en la casilla de debajo que pone "Enviar", porque entonces lo único que pasará es que me llegará un mensaje a mi diciendo que vosotros pensáis que el blog es muy interesante y que se presenta al concurso. Lo cierto es que esta gente ha liado bastante el proceso, para que nos vamos a engañar.

El plazo para votar empieza el 12 de febrero y termina el 2 de marzo

Pues muchas gracias y si os apetece podéis rebotar esta entrada del blog a vuestros amigos para que voten también si les apetece. 

NOTA: como siempre, si queréis ver las ventanas a mayor tamaño sólo tenéis que pinchar en ellas.

lunes, 27 de enero de 2014

Las salamandras del Oviedo antiguo: un estudio histórico y biológico


Aunque no existe un acuerdo entre los historiadores a la hora de datar el origen de Oviedo, se suele aceptar el año 761 como el punto de arranque de la ciudad, ýa que fue el momento en el que se supone que los monjes Máximo y Fromestano se asentaron en una colina en lo que hoy es el casco antiguo de la ciudad. De todas formas, otros autores, como Fernandez-Buelta y Hevia, hablan de un Oviedo de fundación romana anterior al S. VIII.

En ese lugar, el Rey Fruela, en el año 768 ordenó el levantamiento de la primitiva Basílica de San Salvador, que después de varios añadidos y remodelaciones dio lugar a la actual Catedral de Oviedo. De todas formas, el florecimiento de la ciudad llegó de la mano de Alfonso II (791-842), que trasladó la corte a Oviedo y planificó una serie de construcciones, sobre todo eclesiásticas, que junto con el antiguo monasterio de San Vicente fueron cerrados con una muralla. Esta antigua muralla se fue modificando y ampliando su perímetro durante los siguientes siglos, y se culminó a finales del S. XIII, después de que el rey Alfonso X el Sabio ordenara la construcción de una nueva muralla en 1258.

Fotografía aérea del Oviedo antiguo. Línea azul: perímetro de la muralla de Alfonso II según Uría Ríu (1974). Línea roja: perímetro de la muralla de Alfonso X. Las marcas rojas indican los lugares donde se han encontrado salamandras

Esta última muralla de 1400 metros de perímetro,4 metros de alto y 2,20 metros de ancho, resguardaba una urbe de 11,4 hectáreas. En la actualidad aún se conservan varios fragmentos de esta última muralla, sobre todo en la calle Paraíso.

Estas construcciones amuralladas sirvieron de alguna manera para aislar a la población que vivía intramuros, sobre todo formada por personas del clero, de la mayoría de la población, que se asentaba en las zonas extramuros. Pero además de servir de barrera para las personas, hubo algunos animales que quedaron atrapados en su interior. De esta forma, lo que anteriormente era una población continua en la que se producía un transito de individuos sin dificultad, se fue transformando en un conjunto de pequeñas poblaciones fragmentadas que poco a poco se fueron aislando unas de otras.

Entre estos animales, unos anfibios de movimientos lentos y pausados, las salamandras, quedaron atrapados en estas pequeñas islas urbanas hasta nuestros días, pero sus hábitos nocturnos y su comportamiento discreto las ha mantenido ocultas a los ojos de los miles de personas que pasan a diario por estas calles, que ni siquiera sospechan de su existencia. El hecho de que estas salamandras tuvieran la capacidad de parir a sus crías totalmente desarrolladas sin necesidad de pasar por una fase acuática, les permitió sobrevivir en un ambiente en el que la presencia de masas de agua permanente era prácticamente nula.

Salamandra labrada en un capitel del claustro de la Catedral de Oviedo

Pero estos animales no pasaron desapercibidos para todo el mundo. Durante los últimos siglos, en las noches lluviosas y templadas, las sacaveras, que es como se conoce a las salamandras en Asturies, salían de sus escondites entre las piedras de los muros para alimentarse y buscar pareja. Y los artesanos y canteros que construyeron la catedral de Oviedo y muchos de los muebles que hay en su interior, dejaron constancia de ellas en sus obras, junto a representaciones de otros animales, tanto reales, como osos, lobos o caballos, como imaginarios.

Figura de una salamandra tallada en la sillería del coro de la Catedral de Oviedo

Después de haber investigado todos estos indicios y de haber escuchado a varias personas hablar de estas salamandras, sólo quedaba una cosa, comprobar que seguían ahí. En los últimos años se han llevado a cabo varias obras de restauración, tanto en la catedral como del resto de edificios históricos del casco antiguo, que en algunas ocasiones han implicado el rejunteado de los muros de piedra y el pavimentado del suelo. ¿Habrían logrado sobrevivir las salamandras a estas obras o las habríamos perdido para siempre?

Patio de Pachu el Campaneru en la Catedral de Oviedo

Pero había un problema añadido, para confirmar la presencia de las salamandras había que acceder un día de lluvia después de anochecer, pero todas los lugares en los que se había documentado presencia histórica estaban en propiedades privadas a los que no se podía entrar libremente. Tengo que admitir que pensé que me tendría que conformar con mirar desde fuera, pero mis dudas se despejaron después de hablar con Don Benito Gallego, el deán de la Catedral, que se mostró muy interesado en el tema desde el principio y que no sólo me dejó acceder sino que me prestó las llaves para que pudiera entrar cuando considerara que era el mejor momento. Sólo tuve que esperar al primer día de lluvia y a las 9 de la noche abrí la reja del Patio de Pachu el campaneru, en el Tránsito de Santa Bárbara, para buscar a las salamandras.

Al bajar las escaleras comprobé que habían cubierto el suelo de grava y que sólo había unas pocas manchas de hierba, sobre todo en el perímetro. En un primer vistazo no vi ninguna salamandra, a pesar de que la noche era perfecta, y llegué a pensar que ya no las encontraría, pero después de unos minutos rebuscando con la linterna, en una esquina de la catedral, entre unas hierbas apareció una macha negra y amarilla.


Ahí estaban. No tardé en encontrar unas cuantas más, que iban asomando de las pequeñas grietas de los muros o caminaban lentamente entre la poca vegetación herbácea del perímetro. A pesar de que tenía referencias de su presencia, me dio una gran alegría encontrarlas, ya que me seguía pareciendo asombroso que esta población hubiera sobrevivido aislada en una parcela de 400 metros cuadrados durante más de 1000 años.

Después de este primer éxito tenía que intentar confirmar la presencia de salamandras en el resto de zonas posibles que se encontraban dentro del perímetro de la muralla (Monasterio de las Pelayas y Casa Sacerdotal), que al igual que las situadas en la catedral, eran propiedades de la Iglesia. Y al igual que me ocurrió en la catedral, aunque al principio pensé que iba a tener muchas dificultades, fue todo lo contrario y la respuesta no pudo ser mejor, ya que además de interesarse por el estudio me permitieron acceder sin problemas a todos los lugares que les propuse.

Un rincón en el patio de Las Pelayas donde encontramos varias salamandras

Después de varios meses de muestreo, hemos podido confirmar la presencia de salamandras en 28 parcelas de la ciudad, tres de las cuales están situadas dentro del perímetro de la antigua muralla de Alfonso II (el Patio de Pachu el Campaneru, el Cementerio de los Peregrinos y el Monasterio de las Pelayas), y otra más en los jardines de la Casa Sacerdotal, que se encuentra dentro de la muralla construida en el reinado de Alfonso X.

Puntos en los que se ha confirmado la presencia de Salamandras en Oviedo. Los puntos rojos son las poblaciones en las que ya se han recogido muestras para los análisis genéticos

Además de confirmar la presencia de salamandras, hemos recogido muestras de tejido de algunos individuos en varias de estas parcelas para estudiar el efecto de la fragmentación del hábitat sobre la estructura genética de estas poblaciones, ya que la construcción de barreras arquitectónicas o viarias ha podido impedir el libre tránsito de individuos, limitando, o incluso eliminando totalmente, los movimientos de emigración e inmigración entre las distintas poblaciones.

Este aislamiento obligado puede ocasionar a largo plazo fenómenos de deriva génica, ya que al reducirse el número de individuos reproductores se limita también el número de genotipos en la población. Después de varios años, se podría haber producido diferenciación entre poblaciones debido a una diferente combinación de material genético.

En la mayoría de los ambientes naturales resulta imposible datar con precisión la aparición de estas barreras a la dispersión, pero en los ambientes urbanos es posible encontrar documentación en la que figuren las fechas de edificación de murallas o fosos, o el año de construcción de carreteras u otras infraestructuras que han podido actuar como barreras.

¿Se habrán diferenciado estas poblaciones entre sí después de todos estos años?¿Cual es el tamaño mínimo que puede tener una población aislada para sobrevivir?¿Estarán realmente aisladas o habrá una migración subterránea que permita la conexión entre poblaciones? Espero que podamos resolver estas preguntas y alguna más en un futuro próximo, pero mientras tanto seguiré buscándolas en las noches de lluvia en las aceras de mi ciudad.

Por cierto, 2014 es el año de la Salamandra, ¿lo sabíais?

Estos trabajos los estoy realizando en colaboración con Guillermo Velo-Antón, del Centro de Investigação em Biodiversidade e Recursos Genéticos (CIBIO), y con Daniel Oro, del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA).

Agradecimientos
Quisiera agradecer a Don Benito Gallego, a Sor Rosario del Camino Fernández-Miranda y a Don Amalio Bayón, todas las facilidades que me han dado para acceder a los patios de la Catedral de Oviedo, al Monasterio de las Pelayas y a la Casa Sacerdotal. También quisiera agradecerle a Jacobo Blanco y a Gaspar Fernández-Cuesta la cesión de varios planos antiguos y la información que me facilitaron sobre las distintas fases de urbanización de Oviedo. Quiero agradecer especialmente a Araceli todas las indicaciones y contactos que me facilitó para poder localizar los distintos sitios dentro del Oviedo antiguo y la documentacion historíca que me consiguió. Y por supuesto, también quisiera agradecer a todas las personas, muchas más de las que esperaba, que me pasaron datos sobre localizaciones de salamandras dentro de la ciudad, y especialmente a Belén, que me avisa cada vez que se encuentra una por el antiguo.

NOTA: haced click en las fotos para verlas a mayor tamaño

viernes, 24 de enero de 2014

Jugando con las olas


Normalmente cuando salgo a hacer fotos suelo tener una idea en la cabeza de lo que quiero hacer, pero hay veces en las que las condiciones meteorológicas no te lo permiten y cunado llegas al sitio que habías pensado, tienes que cambiar de idea.

Hoy había quedado con Javi Roces para ir a la zona de Avilés a bichear, pero el viento del este hacía prácticamente imposible quedarse en ningún sitio expuesto, así que cambiamos de planes y nos dirigimos a una zona al abrigo del Cabu Peñes. Al bajar a una de las playas vimos una pequeña cascada que nos llamó la atención, así que decidimos bajar a ver si había posibilidad de hacer alguna foto.


Una vez abajo nos dimos cuenta de que no había ningún encuadre bueno para fotografiarla, pero encontramos unas rocas que si que eran llamativas y tenían buenas posibilidades. Así que aprovechando la ocasión y la suerte, que quiso que la marea estuviera en su punto justo y que las olas bañaran la orilla delante de ellas, nos entretuvimos durante más de dos horas jugando con las olas.


Quizás con un poco más de tiempo y preparación le podríamos haber sacado más jugo, pero para un primer contacto no estuvo mal. Las oportunidades están para aprovecharlas y quizás la próxima vez las olas no quieran jugar con nosotros.

NOTA: haced click en las fotos para verlas a mayor tamaño

martes, 21 de enero de 2014

Una foca con mucha suerte

En la entrada anterior os comentaba el caso de la foca que lleva unas cuantas semanas en el puerto del Musel, en Xixón, y cómo había tenido la desgracia de quedar atrapada en un trozo de red que se le estaba incrustando en la cabeza y el cuello. En estos casos, las posibilidades de que un animal atrapado pueda liberarse por sus propios medios son mínimas, y si no se la captura para cortarle la red es prácticamente imposible que pueda sobrevivir.

Desde que se confirmó que estaba enganchada se hicieron varios intentos de atraparla, pero todos fueron infructosos, ya que es prácticamente imposible mientras está en el agua y no se la pudo encontrar en tierra mientras descansaba.

Cachorro de foca gris sin restos de aparejo. 20/01/14. Foto: Ricardo Bascoy

Pero lo que parecía imposible finalmente se produjo, y ayer a última hora, Ricardo Bascoy observó una foca que nadaba en la misma dársena y que no tenía restos de aparejos. Sólo quedaba confirmar que se trataba del mismo animal, ya que otra foca gris de la misma edad también estaba por el Musel, aunque frecuentaba otras zonas.

Al no tratarse de un animal marcado, solo era posible identificar al animal comparando las fotos de otros días y buscando marcas únicas. Esta técnica, que recibe el nombre de foto-identificación, se usa frecuentemente en los estudios con cetáceos, ya que estos animales presentan heridas o muescas en las aletas dorsales que obviamente nunca son exactamente iguales entre distintos individuos. Afortunadamente, al ver las fotos del otro día observamos que tenía una marca blanca en una de las narinas. Sólo hacia falta comparar las fotos.


No había duda, se trataba del mismo ejemplar. En la foto de arriba, tomada el día 18 se ve la marca blanca y los restos de red sobre la cabeza. En la inferior, tomada por Ricardo ayer mismo, se aprecia la misma marca pero no hay restos del aparejo y lo único que se ve es una pequeña herida poco profunda detrás del ojo, que seguramente se ha producido por el roce del nylon.

Los animales nunca dejarán de sorprendernos y  hay veces en que lo que puede parecer imposible al final no lo es. Esta vez este pequeño cachorro tuvo suerte, mucha suerte. Ojalá nunca se vuelva a encontrar con un aparejo y pueda vivir hasta los 40 años, que es la esperanza de vida de su especie.

NOTA: quisiera agradecer a Ricardo Bascoy la cesión de las fotos y también darle las gracias a todas las personas que estuvieron dedicando muchas horas estos días a controlar y a intentar salvar a este animal. Es cierto que hay  personas capaces de apedrear y maltratar a un animal como este, pero también es cierto que hay otras muchas que afortunadamente nunca lo harían y que dedican mucho de su tiempo a protegerlos y a luchar por conservarlos. Los primeros tienen todo mi desprecio y los segundos toda mi admiración y respeto.

domingo, 19 de enero de 2014

Focas grises en el Cantábrico


Durante las últimas semanas, varios cachorros de Foca gris (Haliochoerus grypus) han aparecido en las costas cantábricas. Se estima que al menos 30 ejemplares pueden haber llegado procedentes de las colonias del norte de Europa arrastrados por los últimos temporales, distribuyéndose desde Hondarribia hasta A Guarda, según comenta Jesús Menéndez en su blog.




Ayer nos acercamos varias personas a ver una de estas focas, que se encuentra desde hace días en la puerto de El Musel, en Xixón. Se hizo de rogar, pero después de una hora la vimos aparecer nadando entre los barcos que estaban amarrados. Era muy confiada y no parecía sentir ningún temor por todos los que la mirábamos y la enfocábamos con nuestras cámaras y prismáticos.


También la observamos como se sumergía para coger alguno de los peces descartados el día anterior y que se encontraban en el fondo del puerto. Después de unos minutos, y tras comerse un par de ellos, volvió a salir de la dársena por donde entró y se fue nadando hasta perderse de vista.

Cuando miré las fotos en la pantalla de la cámara, observé lo que me parecieron unos hilos de color verde sobre la cabeza del animal. Me temí que pudiera tratarse de un trozo de red que se le había enganchado, y al llegar a casa y descargar las fotos las peores sospechas se hicieron realidad.



El trozo de red, seguramente de un trasmallo, estaba enredado no solo en la cabeza sino que también estaba en el cuello y ya le había producido un profundo corte. El pequeño animal debió haberse enredado ese mismo día por la mañana, ya en las imágenes que tomaron algunos fotógrafos como Pablo Fernández, el viernes, no se le apreciaba nada. Los aparejos como estos son los causantes de la muerte de miles de focas y leones marinos todos los años, así como de cetáceos, tortugas y aves marinas.

Herida grave ocasionada por un aparejo. Kustnieuws Nederlande & Europa

Las redes de nylon producen importantes laceraciones en los tejidos y llegan a causar la muerte de los animales. Uno de los problemas del nylon es que no se degrada y puede permanecer durante muchos años inalterado, representando una trampa mortal para cualquier animal que pase por donde está. En caso de engancharse, como en este caso, no se pueden liberar por sus propios medios, por lo que será necesario cogerla para liberarla lo antes posible. No será sencillo, ya que resulta prácticamente imposible capturarla en el agua, por lo que se debería esperar a que anochezca y salga a tierra a dormir para capturarla.

¿Que hacer si se encuentra una foca en una playa?

Como ya he comentado al principio, la entrada de focas grises ha sido muy importante y no sería raro que aparecieran más ejemplares durante los próximos días, ya que se acerca un nuevo temporal. Lo normal es que estos pinnipedos aparezcan en las playas, donde salen para descansar y para dormir. En las estupendas fotos siguientes, tomadas por mi amigo Jesús Menéndez en una playa de Cantabria, se puede ver a uno de estos preciosos cachorros descansando tranquilamente sobre la arena.



Tal como comenta Jesús, a pesar de su aspecto amistoso y su comportamiento confiado, se trata de animales salvajes y aunque sean cachorros, si se les molesta podrían llegar a morder para defenderse, por lo que lo que debemos hacer si encontramos una foca en la playa es dejarla tranquila y no tocarla. Por otra parte, hay que añadir que aunque algunos animales pueden presentar heridas o infecciones oculares, la mayoría de ellos están en buen estado y son capaces de valerse por si mismos, por lo que tampoco hace falta capturarlos y llevarlos a un centro de recuperación, a no ser que se trate de casos extremos como el del ejemplar del Musel.


Pero aunque a la mayoría de nosotros nos pueda parecer increíble, estos animales no son bien recibidos por todo el mundo. Al igual que ocurre con los cormoranes o con las nutrias, las focas tienen la "desgracia" de alimentarse de peces y eso es algo que algunas personas, sobre todo pescadores, no pueden soportar. Ayer mismo, se observó como un pescador deportivo intentaban lanzar una roca sobre la foca del Musel, otra fue apedreada y probablemente matada en San Juan de Nieva (Avilés) y otra fue mordida por un perro después de que su dueño lo azuzara para que atacara. Incluso alguna ha sido encontrada con quemaduras de cigarrillos sobre su piel.

Aparte de todas las consideraciones éticas que se nos puedan ocurrir acerca del comportamiento de estos individuos, que se califica por si mismo, hay que indicar que estos actos están totalmente prohibidos, ya que todas las focas son animales protegidos. Si cualquiera observa a alguien molestando a una de estas focas debe denunciarlo, llamando al 112 o al 062 y poniéndose en contacto con la guardia civil para que actúe en consecuencia.

NOTA: haced click en las fotos para verlas a mayor tamaño

martes, 14 de enero de 2014

El factor hijoputa (The motherfucker factor)

Cualquier persona que ya sea por investigación o por pura afición, desarrolle un trabajo de campo, debe tener siempre en cuenta uno de los más importantes imponderables antes de llevarlo a cabo: el Factor Hijoputa (FHP). Por supuesto, si en el desarrollo de cualquiera de esas tareas se ve en la obligación de usar aparatos de medición o fotográficos, debe extremar aún más las precauciones, ya que aparte del valor económico de dichos aparatos, el FHP se multiplica exponencialmente.

Hoy por la mañana fui a recoger mi cámara de fototrampeo, que había colocado en un monte cerca de Proaza el miércoles pasado. Aunque intenté minimizar el FHP escondiéndola entre unos brezos, el día que la coloqué lloviznaba y las prisas contribuyeron a que me confiara en exceso y no tuviera en cuenta que era una zona donde los domingos se suelen realizar cacerías y que el lugar donde había colocado la cámara, tal como pude comprobar hoy, era una zona de paso. El resultado fue que cuando llegué al sitio donde la había puesto, la cámara ya no estaba, me la habían robado.


El mio no es un caso aislado, ya conozco varios casos y alguno concreto, en el que se las han robado varias veces. Es evidente que el Hijoputa no suele perseguir un beneficio económico, y en la mayoría de los casos ni siquiera pretende hacer uso de lo que estropea o roba, lo único que persigue es causar daño, ya sea por frustración o por un erróneo sentido de la propiedad, según el cual piensa que el monte es suyo y que el resto de las personas no tienen derecho ni siquiera a moverse por él.

Mientras volvía en el coche con las manos vacías, me fui acordando de las muchas ocasiones en las que el FHP afectó e incluso tiró por tierra muchos meses de trabajo. Y no fueron una o dos veces, sino varias, algunas de las cuales os describo a continuación, más que nada para que si os veis en la misma tesitura, intentéis evitar el riesgo de que el FHP os joda como me ha jodido a mi.

- Termómetros de registro continuo: con el fin de controlar las temperaturas durante un intervalo de tiempo prolongado se usan estos aparatos, que tienen una memoria interna que graba las temperaturas registradas a intervalos variables, según los programemos. A lo largo de varios años de trabajo hemos colocado este tipo de termómetros en muchas charcas y ríos en nuestros estudios con anfibios y peces. No hace falta decir que siempre intentamos reducir el FHP colocándolos en lugares no visibles. Al principio los escondíamos directamente debajo de una piedra, pero después de los primeros robos preparamos unos tubos de metal en los que los introducíamos, y luego esos tubos los fijábamos con tornillos a rocas de varios kilos de peso. Esto nos obligaba a subir al monte cargados con taladros, baterías y brocas, aparte del material normal de trabajo.

A pesar de todas estas precauciones, nos robaron unos cuantos. Una característica del Hijoputa es que es pertinaz y puede emplear horas en realizar su trabajo. Debido a esto, en un par de ríos sofisticamos la técnica y llegamos a fijar una de esas rocas, de más de 20 kilos de peso, con un cable de acero, que a su vez fijábamos por un extremo a la roca y por otro a la pared del río. Aún así, en un caso, en el río Duje, en el Parque Nacional de Picos de Europa, ante la imposibilidad de llevarse el termómetro, el Hijoputa levantó la roca (supongo que con una palanca o llamando a otros colegas hijoputas) y le dieron la vuelta, de forma que el termómetro en vez de medir la temperatura del agua midiera la del aire, lo que no nos servía para nada y nos arruinaba la serie de datos.

Por supuesto, la información contenida en estos termómetros solo puede ser descargada con un equipo adecuado, del que el Hijoputa carece con toda seguridad. No hace falta decir que el robo de estos termómetros implicó la perdida de una información muy valiosa y que nunca se pudo recuperar.

- Estacas de marcaje: Con el fin de estudiar los movimientos de las truchas durante mi tesis doctoral, en un arroyo de montaña colocamos varias estacas numeradas (con un valor aproximado de 0,50€ cada una) delimitando los distintos tramos. En uno de los muestreos encontramos todas las estacas rotas y procedimos a cambiarlas. El el siguiente muestreo, las estacas estaban intactas pero las habían desordenado, de forma que el tramo 3 era el 6, el 7 el 2 y así sucesivamente. Otra característica del Hijoputa es su capacidad de sofisticación, si en la primera ocasión no jode lo suficiente, en la segunda lo hará mejor.

- Uso de hides: hace unos años colocamos un hide (escondite) en la orilla de un río para fotografiar un posadero de cormoranes grandes. Después de varias sesiones comprobamos que a pesar de que estaba bastante oculto, un guarda, siguiendo las órdenes directas del Principado de Asturias, cuando nos marchábamos se metía él para disparar a las aves. Incluso una vez llegó a entrar, fusil en mano, mientras estábamos dentro. Por supuesto no tuvimos otro remedio que desmontar el hide y pasar a la ofensiva, esperando a que el individuo se dispusiera a hacer uso de su arma (esta vez desde la carretera, cerca de su coche), para ponernos a cantar y a dar palmas y así espantar a los cormoranes.

Una variante del uso de hides personales es el uso de observatorios, que normalmente son construidos por ayuntamientos o consejerías en zonas de interés para las aves. En este caso el FHP se multiplica y hace que estas construcciones pasen por tres fases consecutivas: (a) picadero, (b) letrina y (c) crematorio. Hay que resaltar que las fases (a) y (b) se pueden simultanear. Una fase superior del FHP, que podríamos atribuir al Hijoputa avanzado, tiene lugar cuando el hijoputa, dando rienda suelta a sus frustraciones y con la intención de joder a los usuarios del observatorio, ahorca animales y los expone públicamente. En estos casos, una de las soluciones que se han aplicado para reducir el FHP es inaugurar los observatorios y luego cerrarlos con llave, de esta forma ni los defecadores, ni los fornicadores, ni los pirómanos, ni incluso los propios observadores de aves pueden usarlos. Esto ocurre por ejemplo en el observatorio del embalse de San Andrés, en Xixón.

-Cajas nido: cualquiera que haya colocado cajas nido sabe que una de las precauciones que debe tomar es que hay que colgarlas a suficiente altura del suelo para que el Hijoputa no llegue a ellas. De esta forma se consigue reducir el FHP aunque no se evita completamente.

Hace unos años estuve colaborando con Vicente Polo y Pablo Veiga en un trabajo sobre la selección sexual en los estorninos. Para ello colocamos varias decenas de cajas nido en 2 localidades de Asturies, en una de ellas, la que no estaba en un área protegida, colocamos 15 cajas. A las dos semanas 5 ya habían sido robadas. En una de las ocasiones una persona observó como un individuo, tras comprobar que no llegaba trepando, se fue a su casa a por una escalera de varios tramos y así intentó alcanzarla. Cuando fue avisado de que esas cajas eran para un estudio dijo que él podía coger lo que le diera la gana. A la semana, la caja seguía allí, pero la habían roto a pedradas. Un caso palmario de Hijoputa insistente, con el agravante de chulería.

Tenía más casos, pero creo que ya me he alargado demasiado. Con esta entrada, escrita con una gran dosis de mala leche, quiero por una parte avisaros para que nunca menosprecieis la capacidad de hacer daño de un Hijoputa y por otra quisiera reivindicar el uso de esta hermosa palabra, injustamente apartada de nuestro vocabulario formal por la insana costumbre de lo políticamente correcto, a pesar de que describe perfectamente a una gran parte de las personas que nos rodean, que se sienten felices y dedican una gran parte de su tiempo y su energía a intentar joder a su vecino, ya sea por frustración, por envidia o porque sencillamente son así.

NOTA: el diccionario de la RAE incluye la expresión Hijo de Puta, exactamente con la acepción que he empleado en este artículo, de hecho es la única que pone, por lo que sobran las posibles interpretaciones relativas a la señora que lo parió. También incluye la expresión "hideputa", con el mismo significado pero ya en desuso. Como a mi me gusta más la palabra compuesta Hijoputa (aunque no venga reflejada en el diccionario) es la que me he permitido el lujo de usar.

Hijo de puta.
1. m. y f. vulg. Mala persona. U. c. insulto.

miércoles, 8 de enero de 2014

La fuerza de la mar

La mar rompiendo en Los Negros, frente a la costa de Albuerne (Cuideiru)

Hay pocas cosas más impresionantes que observar la mar un día de temporal. Este pasado lunes pasé por Nuveana y pude ver como enormes olas de más de 8 metros rompían contra las rocas de la costa y contra los acantilados, levantando montañas de espuma y cubriendo la superficie de un blanco intenso.

Temporal en la bocana de la Ría de Avilés en noviembre de 2010

Estos temporales no son raros en invierno y ya se registraron olas de mayor tamaño en otras ocasiones, como en noviembre de 2010, cuando las boyas situadas en la costa de Xixón registraron olas de 11,5 metros con un periodo de 17,5 segundos.

Es en estos días cuando nos damos cuenta de la fuerza que tiene la naturaleza y lo pequeños y débiles que somos frente a ella. Las construcciones humanas: las carreteras, los diques y los edificios caen como castillos de arena ante la fuerza del oleaje. Pueden pasar años o décadas, pero al final la mar siempre vuelve a por lo que es suyo, llevándose por delante todo lo que encuentra en su camino.


Ayer, la mar volvió a enseñarnos su poder y durante unas horas pude ser testigo de cómo algunas de las rocas que conozco desde niño, como la Porcebera, que hace años escalábamos para anillar cormoranes y que mide más de 30 metros de altura, era rebasada por algunas olas.


Olas rompiendo frente a Verdicio, con la isla de la Herbosa al fondo

Hoy por la mañana me acerqué hasta Verdicio, pero la mar ya se había calmado bastante, y aunque había una mar de fondo considerable, las olas no superaban los 4 metros de altura, y fue amainando a medida que pasaron las horas. En unos pocos días se habrá calmado, pero sólo es un estado transitorio. La mar es como un león, la mayoría del tiempo esta dormida pero de vez cuando se despierta y nos enseña su verdadera cara.

NOTA: haced click en las fotos para verlas a mayor tamaño.