Aunque oficialmente la primavera no llegará hasta el 20 de marzo, en el campo ya se nota el cambio de estación desde hace varias semanas. Muchas aves migradoras, como las golondrinas y los milanos negros han regresado de sus cuarteles de invierno y ya buscan los lugares donde nidificar. Y los que no se han marchado, como los reptiles, se desperezan del letargo invernal y aprovechan la subida de las temperaturas para salir de sus refugios y aprovechar los rayos del sol.
Ayer, en una excursión por una zona de brezales y tojales costeros de Asturias encontramos varias víboras de seoane (Vipera seoanei). Confiadas gracias a su coloración, que las hacía casi invisibles en su entorno, pasaban desapercibidas ante muchas aves rapaces y mustélidos que encontrarían en ellas un almuerzo más que apetecible. Pero su colorido y su inmovilidad también las mantiene ocultas a los ojos de los ratones y musarañas que forman parte de su dieta.
Una de las víboras que encontramos era un precioso macho, con su piel recién mudada que resaltaba perfectamente el contraste de su dorso negro y las líneas amarillentas típicas de esta especie. No estaba muy delgada, así que seguramente ya habría comido después de despertar de la hibernación.
Cerca de donde se encontraba una de las víboras, encaramado a las ramas de un toxo, un macho de lagarto verdinegro (Lacerta schreiberi) también disfrutaba del sol del mediodía. Dentro de unos meses, la temperatura a esa hora ya será demasiado alta para aguantarla, pero a mediados de marzo, con 20ºC es una temperatura muy agradable y hay que aprovechar.
Pareja de lagartos verdinegros con librea nupcial
La cabeza de los machos ya empieza a cambiar de color. Por ahora solo parte de en mandíbula inferior se nota el cambio, pero dentro de unas semanas, su cabeza se pintará de azul cobalto como símbolo de su estatus. Los que muestren un colorido mas intenso serán los más dominantes y tendrán más posibilidades de aparearse.
NOTA: haced clic en las fotos para verlas mejor
También están regresando de sus cuarteles de invierno los vencejos. Antes de ayer 15 sobrevolaron un suburbio del poniente de Sevilla capital 3 individuos. Qué alegría! Ahora a estar atentos al reclamo de los abejarucos.
ResponderEliminarHola Daniel, aquí en Asturias aún tardarán un mes en llegar. Como dices siempre es una alegría verlos por primera vez. Sin duda son unos de mis pájaros favoritos.
EliminarUn abrazo